EXPLORANDO MENORCA...
No es Mallorca. Ni la divertida Ibiza, ni la desconocida Formentera... es Menorca. Un paraíso que nada tiene que envidiar a sus hermanas Baleares. Desde la antiguedad, desde que existe ese hermoso mar llamado MEDITERRANEO, Menorca en sus diferentes nombres, ha estado poblada. Su primera época brillante fue la EDAD DEL BRONCE, en plena Prehistoria, de la cual quedan las únicas e impresionantes TALAIAS.
Existía un tercer tipo de construccion, las llamadas TAULAS, que estaban construidos en forma de herradura y cuya función era la de servir de santuario o lugar de espiritualidad.
Después pasaron a ser fenicios, cartagineses, griegos... en fin todos los pueblos que habitaron alguna vez el Mar Mediterraneo, tuvieron bajo su control la isla de MENORCA. Un 17 de Enero de 1287, la corona de Aragón, reconquistó esta isla, que por entonces estaba desolada y triste por años de ocupaciones diferentes y que hasta ese momento había permanecido islámica. La isla recuperaba su esplendor marítimo y económico propio de la por entonces poderosa corona de Aragón. Pero en plena Edad Media, la isla empezó a sufrir despoblación severa y alarmante, producida por la reaparicion de las luchas de clases sociales y de las revueltas populares contra la monarquía.
También fue británica, El Reino Unido se la anexionó de pleno derecho en 1713 después de varios años de ocupación. Lo positivo de esa ocupación y pertenencia británica fue que se recuperó el esplendor económico basado en un fuerte dominio comercial y de transporte de mercancías. Fue devuelta a España en 1802. Pero la influencia comercial y arquitectónica inglesa aún son muy importantes en la isla.
Incluso en las fiestas y actos culturales que se realizan en la actualidad, el homenaje y la presencia británica son evidentes y muy celebrados, como es el caso de este desfile militar que emula un batallon del ejercito británico de la época con su correspondiente izada de bandera.
Durante la barbarie de la Guerra Civil Española, Menorca permaneció siempre combatiente para el sector republicano, hasta que sucumbió en 1939, casi al final de la guerra. En años de la dictadura fueron lastimosamente frecuentes los fusilamientos, aunque la mediación inglesa en este caso acabó finalmente con ellos asegurando una transición de paz durante la dictadura.Sus playas e instalaciones turísticas naturales están mucho mejor conservadas que sus vecinas islas, debido a que la explotación turística en MENORCA es mucho mas tardía que en las demás, ya que siempre había subsistido con la industria local y agrícola. No obstante aún esa pequeña economía y agricultura local aporta grandes beneficios con reconocimiento internacional de algunos productos como el calzado (menorquinas, nombre de unas sandalias veraniegas típicas), o el queso de MAHÓN con denominacion de origen.
Así que esta bellisima isla que no he tenido el placer de visitar aún, ha bebido de todas las culturas posibles y se ha mantenido bella, abierta y con mucha ilusión por dar lo mejor de si misma siempre y eso que competencia no le ha faltado, no tiene el tirón mediatico de su hermana mayor MALLORCA, ni la llamada festiva y alegre de IBIZA, ni tampoco cuenta con la protección de FORMENTERA Y CABRERA, pero no le importa, su evolución y actitud son siempre positivas. Para cerrar este post dedicado a MENORCA os dejo un vídeo promocional de la oficina de turismo, donde se puede ver el encanto que tiene esta isla que nada tiene que envidiar a las demás.
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