CUPIDO OBSESIONADO
Os pido perdón. A tí Vanessa, a ti Natalia. Y a ti Elisabet, Patricia, Mariona, Laia, Miriam y Ainhoa. Con matices en algunos casos pero perdón a todas vosotras. Hace mucho tiempo de eso ya, esta todo olvidado pero nunca es tarde para reconocer un mal comportamiento. Nunca he entendido eso del amor, ni siquiera ahora que mi sentimiento es compartido, logro entenderlo. Creo que de eso se trata, eso es lo que lo hace tan grande, que es imprevisible, incontrolable, independiente. Os pido perdón por lo mal que me porté. Vanessa, nunca te dije lo que sentia por tí, aunque todo el mundo lo supo, apostaria que tu también. No era un secreto, contigo digamos que no me porte mal, quizas por ser un cobarde o por ser la primera victima de este CUPIDO OBSESIONADO.
Puedes considerarte afortunada en relacion a las demás, lo mas grave que te hice fue no decirte lo que sentia. Después vino Elisabet, que me disparó la flecha, y no al revés, que cunado quise reaccionar ya era tarde. No me esperaba despertar eso por alguien como lo desperte por tí. Si con Vanessa mi unico pecado fue la cobardía, contigo pequé de lento. Mi penitencia fue el perderme una final de competicion europea por visitarte para no acabar confesando nada. Con la atenta mirada de mi perro de entonces, el cual jamás tuvo un paseo tan largo como ese. O sea que tu Elisabet, afortunada también, otra cuyo perdon es con matices. Lo peor de este Cupido empezó contigo Natalia, a ti si que te dí la lata. No hice como Vanessa, te declare mi amor mas de una vez y como siempre todo el mundo era testigo de ello, ni tuve el fallo de Elisabet de ser lento, no esperé. Sentí y dijé, declaré. Pero no me controlé, fui demasiado insistente, un pesado en toda regla. Rompiste todo contacto conmigo y no era para menos. Atrás quedaron aquella carta que te envié a tu casa, la que dices que nunca llegó, y la hora de espera en el patio del colegio esperando que salieras con una rosa fresca en mano. Reconozco que fui pesado, pero fuiste cruel, esos dos feos no eran la respuesta a esos dos detalles románticos. En mi defensa diré tambien que conté con apoyo, jamás nadie me dijo que parara, es más recibi ayuda. De ser cobarde y lento pase a ser pesado, pero con Patricia, la siguiente fue diferente. Ella queria algo conmigo, muchos lo sintieron así, fue lo que me animo a dar el paso, tu sonrisa, tu cercanía, tus miradas... pero todo fue un juego. Fui utilizado, hasta lo confesaste. Otro perdón con matices. Otro error de Cupido, mucho tiempo y detalles romanticos para nada... a la basura. Invitar a copas, o utilizar a la hermana fue mis errores en el caso de Laia, fue poco lo que me duró pero tambien demostre un Cupido errado y pesado. Ni cobarde, ni lento, ni pesado, ni utilizado, fui impulsivo, demasiado en tu caso.A parte de Natalia otra gran victima otro indiscutible PERDON es para Miriam, madre mia lo mio ahi si que fue Obsesion con mayusculas y todas las letras. Un año de insistencia, de detalles romanticos que chocaban con la misma respuesta, una pared inquebrantable de noes. Pero es que me diste fuerte, no era capaz de mirarte ni de hablarte con normalidad. Implique amigos y amigas tuyas, me costó discusiones, enfrentamientos, nuestra escasa relacion se fue al garete, no me importaba... seguia y seguia. Bravo por tí, hoy en frio nada que decir. Actuacion tuya de 10.
Cuantas veces he repetido lo mismo, declaraciones de amor fallidas, cartas, peluches, flores, detallazos de caballeros de la Edad Media, pero realizados por un pesado. Podria hacer dos blogs, necesitaria otro de entrada para explicar lo de Mariona y lo de Ainhoa. Con matices, yo hice mal en general pero vosotras fuistes crueles. Me ha costado entender que en el amor la mujer tiene la sartén por el mango siempre y despues de tantos fallos se me quitaron las ganas de dudarlo y de hacer numeritos romanticos. Hagas lo que hagas el resultado es el mismo: Pasara lo que ella quiera o mejor dicho, lo que ella sienta.
Para cerrar una cancion cuyo titulo sirve como conclusion a todo este rollo: ELLA SERAN AMADAS... yo añadiria por quien ellas quieran y de la manera que ellas quieran. Ni Cupido ni leches... como tiene que ser.
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