VERSION PROPIA DE ORGULLO Y PREJUICIO.

Fuimos uña y carne, he aprendido tanto de tí. Seguro que tu orgullo te prohibe reconocer que tú tambien de mí. Porque emulando el libro de JANE AUSTEN, fuimos orgullo y prejuicio. Tan diferentes, tan imposibles... pero unidos como una piña, inseparables...o no? Tú siempre negando lo que sentias para hacerte el fuerte, yo perdiendo demasiado tiempo en pensar y analizar antes de actuar. Yo era la calma y tu el latigazo que ni siquiera se siente de lo rapido que viene. Mi amigo, mi alma gemela, el que me dio la vuelta, como a un calcetín, el que me puso siempre de cara a la corriente favorable. Yo era la suavidad que te faltaba, la pausa necesaria, el lado blando, el cojin donde ahogar tus penas de hombre herido.

Sé que estás mejor sin mí. Siempre tuviste esa capacidad de conectar con la gente y de arrastrar a miles de personas contigo, a tu voluntad. Yo en cambio, me quedé solo. Herido, confundido, sin saber lo que habia pasado. Pensando que te conocia y sin darme cuenta que habia estado delante de una persona diferente. Te pudo el orgullo como siempre. Es tu virtud, tu defecto, tu espina dorsal, aquello que te define. El dichoso ORGULLO. No pudiste soportar que te dejara de lado que pasaras a ser segunda opcion para mi. Tú el orgulloso, el que tiene a la gente a sus pies, el que elige quien y cuando le acompaña, el que por cierto, tantas veces me dejó a mi como segunda y tercera opcion. Ese, no podia soportar no ser protagonista. Que te pusiera un pero de repente. Todo porque descubri el amor. Por fín, tantas veces aguantando tus inestables aprejas, viendo como desaprovechabas grandes mujeres, soportando que los demas te prefirieran a ti antes que a mí. Acostumbrado a que me pasaras por encima en ese tema... No tendria pareja sino era cuando tu quisieras y quien tu quisieras. Eso lo entendi despues.

Pues al final lo consegui. Consegui ser feliz, encontrar el amor. Y quise compartirlo contigo, como tantas otras cosas de la vida. No quisiste, no me dejaste. Me hiciste sentir mal, tenia que abandonar lo que sentia por ella y volver a ser uno mas de tus sequitos, tu primer escudero. Lo siento pero no. Tal vez no fue esa tu intención, tal vez fuera un brote, un calentón post adolescente, un ataque de rabia y sorpresa... no sé. Solo tú sabes porque lo hiciste porque lo dijiste, el caso es que pusiste el problema de hacerme elegir... Y perdiste. Me dolió. Sabes como soy, sabes lo que necesito un amigo como tú, sabes lo bien que nos lo pasabamos... A ti tambien te dolió, seguramente porque te fastidió el maldito orgullo que no aceptara tu reto. Es igual, ha pasado mucho ya. Hubo un tiempo que esperé tu perdon, que espere tu arrepentimiento. Después tuve tiempo para el rencor, para la ira, para la venganza. Te perdí a tí y los perdi a casi todos que arrastraste contigo. Cuantas cosas deje de sentir y de disfrutar por tu culpa. Cuanto me has hecho falta. Ahora solo pienso en tí como alguien que por querer ir delante se ha quedado atras en lo importante. En la estabilidad familiar, en la sensacion de independencia dentro de la falta de libertad. En eso, que quizas aún no valores, en eso vas a la cola. Hasta yo, tu amigo PREJUICIOSO, el que no avanzaba hasta pensarselo dos y tres veces... el que iba atras de todo. Ese te adelantó en ese tema. Hoy soy otra persona, seguramente gracias a la semilla que pusiste en mi, sigo siendo extremadamente analitico, desconfiado e intuitivo, pero soy optimista, de mente un poco mas fria y muy muy defensor de lo mío. Como tú. No estaras de acuerdo con ninguna de estas palabras, si es que reconoces leerlo. Pero lo harás, tu orgullo te obligara a echarle un vistazo. No quiero la razón, solo decirte mi version de lo que pasó. Abrir mi corazón, contarte mi verdad. Sin prejuicios.

La poniamos en el coche, compuesta en plena adolescencia nuestra. Donde el fervor de nuestra amistad echo unas raices gordisimas. OBK y uno de sus clasicos me sirven para cerrar... por las lagrimas echadas.